ENERGUMENO EN SMART

Hace cosa de unos meses me pasó lo siguiente. Iba yo con mi pequeñuela a llevarla a la guarde. Era más o menos eso de las 9 de la mañana e íbamos sin ningún tipo de prisas. De repente, en una rotonda(si si, ese sitio donde puedes morir en cero coma), se me mete un Smart justo delante de nuestro coche sin parar en el ceda el paso que tenía. Pero para que os hagais a la idea no se metió un poco y frenó, o me pidió perdón. No no, se metió hasta tal punto que si no freno en seco me lo como. El flequillo de Paula me dio en el cogote. Acto seguido me salió el instinto:le pité.Ahora en frío no sé cómo se me pudo ocurrir hacer eso.Pitar a un coche que te hace eso es algo de descerebrados, de locos lo sé,pero soy así. Cuando yo la cago y me pitan pues pido perdón, y si aun asi el tio insiste pues le digo que lo siento y me voy, no me da por hacer otra cosa. Este figura que me tocó no es de esa corriente. Es más bien de la opuesta.Fue oir el pito ,se paró en medio de la rotonda , se puso a mi lao y creo que entre hijodepu... me cagon tus muertos, me vas a comer la po.... y algo que no recuerdo también me preguntó que si estaba bien.Y para culminar la hazaña me echó un galipo que me dio en el brazo.Todo eso en medio minuto.Miré por el retrovisor y vi que mi hija miraba al fenómeno por la ventana con cierto estupor.Cogí mi orgullo, un clinex(de la marca del mercadona ,por supuesto) y proseguí con mi camino. Pero cual fue mi sorpresa, cuando aun con la sangre caliente veo una pelotilla negra que viene a toda leche hacia nosotros. Pensé:este hijo del alcohol quiere pedirme perdón o algo por el estilo, se ha dado cuenta de que su actitud no ha sido la correcta y el resquemor no le permite sentirse bien.Pues no, se puso a mi lado y me tiró algo al costado de mi coche. Los que me conoceis, sabeis de mi temperamento y de que muchas veces no pienso las cosas.Y los que no pues soy así.Además, no es que sea el puto Arnold Sbarzenager ese de las pelis de Conan,pero no soy pequeño, hago deporte y alguna hostia que otra sé que se  habría llevado( Porque a simple vista era un pokemon).No hice nada, dejé que se fuera haciendo un trompo en medio de la calle donde me había cogido. No sabía si volver a casa o seguir hacia la guarde. Decidí hacer lo segundo. A la vuelta volví a ver que me había tirado. Me bajé del coche y vi un destornillador de unos 25 cms, que dio a menos de 2 de la ventanilla de mi hija Paula.